Las corrientes de agua viva que fluyen desde Jerusalén no se secan a pesar de los calores intensos del verano ni se congelan por los vientos fríos del invierno tempestuoso. Regocíjate, hermano creyente, de que has sido guardado para dar testimonio de la fidelidad del Señor.
Las estaciones cambian y tú cambias, pero tu Señor permanece siempre igual, y las corrientes de su amor son tan profundas, tan amplias y tan bastas como siempre. Los calores de las preocupaciones y las pruebas abrasadoras son vehículos que nos conducen al clamor por aquel PODER refrescante del rio de su gracia; A este puedo ir de inmediato y beber al máximo de su fuente inagotable, ya que tanto en verano como en invierno se desborda su caudal.
Las fuentes superiores nunca son escasas, y bendito sea el nombre del Señor, las fuentes inferiores tampoco pueden fallar. Elías encontró el arroyo de Cherit seco, pero Jehová seguía siendo el mismo Dios de la providencia. Job dijo que sus hermanos eran como arroyos engañosos, pero encontró a su Dios como un río de consolación desbordante. El Nilo es la gran confianza de Egipto, pero sus inundaciones son inestables;
Nuestro Señor es siempre el mismo. Al cambiar el curso del Éufrates, Ciro tomó la ciudad de Babilonia, pero ningún poder, humano o infernal, puede desviar la corriente de la gracia divina. Las huellas de los antiguos ríos se han encontrado todas secas y desoladas, pero las corrientes que se elevan en las montañas de la soberanía divina y el amor infinito siempre estarán llenas hasta el borde. Las generaciones pasan, pero el curso de la gracia no se altera.
El río de Dios puede cantar con mayor verdad que lo que versa el poema de Alfred Tennyson "The Brook" El Arroyo:
"Los hombres pueden venir, y los hombres pueden ir,
Pero YO sigo para siempre ".
¡Cuán feliz eres, alma mía, de ser conducida junto a tales aguas tranquilas! nunca vayas a otras corrientes, para que no escuches la reprensión del Señor: "¿Qué tienes que hacer en el camino de Egipto para beber del río fangoso?"
"En verano y en invierno será". - Zacarias 14: 8. Hasta manana
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